Kasandra e Ihardets van en un vuelo que va desde París a Islamabad, el avión para en el aeropuerto de Roma, sin explicación ninguna. Para ahuyentar la inquietud, el aburrimiento y los nervios, los dos protagonistas del libro empezarán a jugar, al viejo juego de contar películas. Gracias al juego, nos sumergiremos en la historia de films conocidos, no conocidos, clásicos y no tan clásicos. Uniendo los sucesos de las películas con los problemas cotidianos de la vida: la felicidad, la soledad, la muerte, la convivencia... Pero además de usarlo como vía de escape para alejarse del cada vez más pesado ambiente del avión, buscarán las claves para esas preguntas en el llamado séptimo arte.

Hoy en día, Jeu de Paume es uno de los museos que se encuentra en París. Quizás, no sea el más conocido. Porque estando cerca de Louvre, parece más pequeño. Pero en su humildad, lo que fue alguna vez un frontón, es refugio de infinidad de historias. En ella se cobijaron, por ejemplo, las revolucionarias y revolucionarios del siglo XVIII. que no aceptaban la tiranía de la monarquia, y en una sola noche, se concilió la Carta de Derechos Humanos. Los y las pintoras impresionistas y surrealistas también se apropiaron a principios del siglo XX, y nos enseñaron como romper las leyes de la representación estética. Más adelante se ha utilizado para organizar posiciones. El lector encontrará algo de todo esto en este libro que enlaza la reflexión, la literatura y las imágenes. Nos cuenta como por una manifestación en contra de la invasión de Iraq, cerrarán el museo Jeu de Paume y el protagonista, Galder, se quedará encerrado dentro del museo.

"Este libro me ha mostrado que la filosofía no es una ocupación sobre el humo imposible de la pipa que parece no fuma Magritte. El autor nos instruye agudamente en las mentiras que fumamos en pipa diariamente, rompe con sabiduría la capa de esas mentiras, nos enseña con humor las pieles bajo la piel. Así queda dicho que recomiendo la lectura de este libro a todo tipo de lectores, también a quienes, como a mí, se nos hace incomprensible la filosofía. Es más, a estos últimos se lo recomiendo especialmente. Porque este libro enseña a desfilosofar la filosofía. Filosofando. Y también lo hace cuando escribe alguna palabra de origen griego". Koldo Izagirre.

Dos textos que en los años 90 indagaban en ambos conflictos siempre en el intento por entender no solo el sentido de las luchas sino las posibles vías para la paz